Todo lo que necesitas saber sobre los ETF de oro

Los ETF de oro son un tipo de fondo de inversión que contiene activos respaldados por oro, como oro físico o acciones de empresas mineras. Permiten a los inversores beneficiarse de la subida del precio del oro sin necesidad de adquirir directamente lingotes u otras formas de oro físico. Si te interesa invertir en oro y cómo hacerlo de forma eficiente, en este artículo te contamos todo lo que necesitas saber sobre los ETF de oro.

Puntos clave:

• Al comprar un ETF de oro, estás adquiriendo una participación en oro físico o en compañías del sector minero del oro.
• Los ETF de oro se pueden comprar y vender durante el día, como si fueran acciones en el mercado.
• Entre las ventajas de los ETFs están su liquidez, la facilidad de acceso y la propiedad fraccionada del activo.
• Las desventajas incluyen el riesgo de contraparte, errores de seguimiento (tracking error) y la falta de posesión física del metal.

¿Qué son los ETF de oro?

Los ETF de oro (Exchange Traded Funds) son fondos de inversión cotizados que contienen activos respaldados por oro, como lingotes físicos o contratos de futuros, y que se negocian en bolsa del mismo modo que las acciones. Permiten invertir en oro sin necesidad de poseer el metal físico.

Al igual que ocurre con las acciones, los ETF de oro se dividen en participaciones que pueden comprarse y venderse durante la jornada bursátil. Al adquirir participaciones de un ETF de oro, se está comprando una fracción del oro que posee dicho fondo. Esto significa que no se posee directamente el oro físico, sino una parte proporcional representada por el ETF. Por ejemplo, si un ETF mantiene 50 onzas de oro y se adquiere una participación, se está invirtiendo en el equivalente a 1/50 de una onza.

El precio de los ETF de oro está directamente vinculado al precio del oro en el mercado. Por tanto, si el oro sube un 1 %, el valor del ETF también lo hará en el mismo porcentaje. A junio de 2024, el mayor ETF de oro del mundo es el SPDR Gold Shares (GLD), con un volumen gestionado de casi 63.000 millones de dólares en activos.

Ver también: ¿Por qué comprar oro? Razones para invertir en oro físico

Tipos de ETF de oro

Existen distintos tipos de ETF de oro, según el tipo de exposición que ofrecen al metal precioso. Los más comunes son los siguientes:

ETFs que invierten en oro físico

Estos fondos adquieren y almacenan lingotes de oro físico directamente. El valor de las participaciones refleja el precio del oro en el mercado en tiempo real. Son una manera eficaz de obtener exposición directa al oro físico sin necesidad de encargarse del almacenamiento, el seguro o la custodia del metal. Además, ofrecen una mayor liquidez que el oro en formato físico y permiten invertir con una menor cantidad de dinero.

Ejemplos destacados:

• iShares Physical Gold
• Invesco Physical Gold
• WisdomTree Physical Swiss Gold
• Amundi Physical Gold ETC
• Physical Gold ETC C

ETFs que invierten en acciones de empresas mineras

Estos fondos no mantienen oro físico, sino que invierten en acciones de compañías dedicadas a la extracción, producción y comercialización del oro. La rentabilidad de estos ETFs está vinculada al rendimiento financiero de las empresas, que puede depender de factores como los costes operativos, las condiciones del mercado, la demanda global, o incluso decisiones políticas o ambientales que afecten al sector.

ETF de oro apalancados

Los ETFs apalancados utilizan derivados financieros y apalancamiento mediante deuda para amplificar los movimientos del precio del oro. Pueden ofrecer mayores beneficios potenciales, pero también conllevan un riesgo significativamente más alto. Por esta razón, solo se recomiendan a inversores experimentados que tengan una estrategia definida y una elevada tolerancia al riesgo.

Ventajas de invertir en ETF de oro

Invertir en oro ofrece numerosas ventajas: actúa como protección frente a la inflación, es un depósito de valor fiable y funciona como un activo refugio que puede proteger al inversor durante períodos de inestabilidad económica o recesión. Pero, ¿por qué optar por los ETF de oro en lugar de adquirir oro físico?

Para ayudarte a decidir si este tipo de inversión en oro es adecuada para ti, veamos las principales ventajas de los ETF de oro en comparación con el oro físico:

Puedes invertir pequeñas cantidades

Los inversores con presupuestos más reducidos pueden encontrar los ETF de oro mucho más accesibles que la compra directa de oro físico. Esto se debe a que los ETFs permiten la propiedad fraccionada, lo que significa que puedes invertir pequeñas cantidades e ir aumentando tu exposición al oro de forma gradual.

En cambio, el oro físico suele requerir una inversión inicial más elevada, y resulta menos rentable si se desea ampliar la posición poco a poco. Por tanto, los ETFs abren la puerta a un mayor número de inversores, especialmente a quienes no disponen del capital necesario para comprar lingotes o monedas de oro desde el principio.

No tienes que preocuparte por el almacenamiento ni la seguridad

La inversión en oro físico implica pensar cuidadosamente en cómo almacenarlo de forma segura. Muchas personas optan por comprar una caja fuerte, alquilar una caja de seguridad en un banco o contratar un servicio de almacenamiento especializado, además de pagar un seguro para proteger el valor del oro. Todo esto supone un coste adicional a la inversión inicial.

Con los ETF de oro, no es necesario preocuparse por el almacenamiento ni por la seguridad, ya que no estás en posesión directa del metal. Esto permite beneficiarse del valor del oro sin asumir los costes ni las gestiones asociadas a su custodia.

Ver también: ¿Cuál es la forma correcta de almacenar el oro?

Se compran y venden de forma cómoda

Los ETF de oro pueden comprarse y venderse fácilmente a través de una cuenta de bróker tradicional, del mismo modo que se opera con acciones. El proceso suele ser sencillo y las operaciones se ejecutan en tiempo real, durante el horario de mercado.

A diferencia del oro físico, no hay que preocuparse por la logística, como los envíos, la verificación de autenticidad o la comunicación con vendedores o distribuidores. Esta comodidad convierte a los ETFs en una opción atractiva para quienes valoran la rapidez y la eficiencia a la hora de operar.

Tienen mayor liquidez que el oro físico

Aunque el oro físico es un activo altamente líquido, venderlo puede llevar más tiempo. Hay que encontrar un comprador fiable, negociar un precio justo y gestionar el transporte seguro del metal.

Además, si posees grandes cantidades —como un lingote de 500 g—, puede ser difícil liquidar solo una parte del valor. No es posible vender únicamente una fracción del lingote sin fundirlo o transformarlo. Con los ETF de oro, en cambio, puedes comprar o vender la cantidad exacta que desees en cada momento, de forma rápida y sencilla.

Lee más: ¿Cuándo es el mejor momento para comprar y vender oro?

Inconvenientes de invertir en ETF de oro

A pesar de las múltiples ventajas de los ETFs de oro, también existen ciertos inconvenientes que conviene tener en cuenta. Es fundamental conocer tanto los beneficios como los riesgos antes de decidir si este tipo de producto es adecuado para ti.

No hay posesión física del activo

Para algunos inversores, la ausencia de propiedad física representa una ventaja, ya que elimina las preocupaciones relacionadas con la logística, el almacenamiento y la seguridad. Sin embargo, para otros, esta misma característica puede considerarse una desventaja.

Una de las razones más valoradas para invertir en oro es la seguridad que aporta tener un activo tangible, independiente de las divisas fiduciarias. En este sentido, los ETFs de oro no proporcionan el mismo nivel de seguridad que poseer oro físico como lingotes o monedas, y pierden su función tradicional como depósito de valor directo.

Sigue leyendo: El rol del oro como cobertura contra la inflación

Posibles errores de seguimiento

Aunque los ETFs de oro están diseñados para replicar el precio del oro, lo cierto es que no siempre logran un seguimiento perfecto. Existen márgenes de diferencia, conocidos como errores de seguimiento, que pueden provocar una pequeña desviación entre el valor del ETF y el precio real del oro en el mercado (spot).

La magnitud del error de seguimiento puede variar de un fondo a otro, y dependerá de factores como la gestión, los costes internos, y la estructura del producto.

Sigue leyendo: ¿Qué determina el precio del oro?

Riesgo de contraparte

Otra de las ventajas del oro físico es que no conlleva riesgo de contraparte: el activo está en tus manos y eres su único responsable. En cambio, al invertir en ETFs de oro, sí se introduce este tipo de riesgo, ya que estás confiando tu inversión a una empresa emisora que actúa como intermediaria.

El riesgo de contraparte consiste en la posibilidad de que la entidad gestora del ETF no pueda cumplir con sus obligaciones financieras. En caso de quiebra o problemas económicos, el valor de tu inversión puede verse afectado.

Por ello, es crucial que los inversores se aseguren de que el fondo esté respaldado por una entidad sólida, con un historial financiero consolidado y una buena reputación en el mercado.

Productos más complejos

Para algunos inversores —especialmente los menos experimentados— los ETFs de oro pueden resultar más complejos que el simple hecho de comprar oro físico. Existen diferentes tipos de ETFs con objetivos distintos, estructuras variadas y niveles de riesgo diversos.

Comprender estas diferencias requiere cierta formación financiera y puede resultar más complicado que adquirir directamente una pieza de oro físico, que es una operación más sencilla y directa.

Influenciados por las condiciones del mercado

Como cualquier activo cotizado en bolsa, el valor de los ETFs de oro puede fluctuar en función de las condiciones del mercado. Factores como el sentimiento inversor, el estado de la economía, la volatilidad bursátil o incluso eventos geopolíticos pueden alterar su cotización.

Aunque el oro es considerado un activo refugio, el comportamiento del ETFs también puede verse condicionado por la percepción general del mercado y por factores ajenos al precio del metal.

Cómo invertir en ETF de oro

Invertir en ETFs de oro es un proceso sencillo que se puede realizar a través de una cuenta de bróker, un roboadvisor o una app de inversión en bolsa. A continuación, te explicamos paso a paso cómo empezar a invertir en ETF de oro de forma eficaz:

Paso 1: Encuentra el ETF de oro en el que deseas invertir

Existen numerosos ETFs de oro en el mercado, cada uno con objetivos diferentes y perfiles de riesgo específicos. Lo primero es determinar qué tipo de ETF se ajusta mejor a tu perfil:

• ETFs respaldados por oro físico, como iShares Physical Gold o Amundi Physical Gold ETC, ideales para quienes buscan exposición directa al metal precioso.
  
  
• ETFs que invierten en acciones de empresas relacionadas con el oro, como mineras o productoras, que ofrecen mayor potencial de rentabilidad, aunque con más volatilidad.

Una vez definido el tipo de fondo, puedes explorar las opciones disponibles en tu plataforma de inversión habitual. Las apps y brókers suelen mostrar los ETFs de oro más populares o con mayor volumen, lo que puede ayudarte a elegir una primera inversión sólida.

Paso 2: Analiza el rendimiento del ETF

Cuando tengas una lista reducida de posibles ETF, es recomendable investigar a fondo cada fondo:

• Revisa los activos subyacentes del ETF. Evalúa su rentabilidad histórica (preferiblemente en los últimos 3 a 5 años).
• Consulta el ratio de gastos (expense ratio), que indica los costes de gestión del fondo.
• Analiza su liquidez, es decir, con qué facilidad puedes comprar o vender participaciones.

Todos estos datos estarán disponibles en el folleto del fondo (prospectus), que puedes consultar en la página web oficial del proveedor del ETF. Si lo prefieres, también puedes consultar con un asesor financiero que te ofrezca una recomendación personalizada e imparcial, teniendo en cuenta tu situación financiera y tus objetivos de inversión.

Paso 3: Compra tu ETF de oro

Una vez hayas elegido el ETFs de oro más adecuado para tus objetivos, podrás proceder a la compra. El proceso es el mismo que para cualquier otra acción o fondo cotizado.

Invertir en oro físico vs ETF de oro

Si aún no tienes claro si te conviene más invertir en oro físico o en ETFs de oro, a continuación te mostramos una comparativa clara entre ambos, destacando sus principales diferencias:

	ORO FÍSICO	ETF de oro
COMPRA Y VENTA	Se adquiere a través de casas de moneda oficiales o privadas, distribuidores de metales preciosos y joyerías.	Se negocian en bolsas de valores.
TIPO DE INVERSIÓN	Es una inversión directa: posees físicamente el oro.	Son una inversión indirecta: se adquieren participaciones que representan una cantidad de oro, pero no se posee el metal directamente.
TANGIBILIDAD	El oro es un activo tangible que puedes tener en la mano, lo que proporciona una mayor sensación de seguridad a muchos inversores.	Son intangibles, es decir, no se pueden ver, tocar ni almacenar físicamente. Esta característica puede resultar incómoda para ciertos inversores, especialmente en épocas de alta volatilidad.
RIESGO DE CONTRAPARTE	No existe riesgo de contraparte, ya que tienes el control total de tu inversión.	Los ETFs de oro implican un riesgo de contraparte: si la entidad emisora incumple sus obligaciones, podrías perder parte o la totalidad de tu inversión.
COSTES DE TRANSACCIÓN	Al comprar oro físico, normalmente se paga una pequeña prima sobre el precio spot del oro. Al venderlo, suele recibirse menos del precio spot debido a las comisiones de los intermediarios.	Generalmente, se paga una pequeña comisión al bróker al comprar o vender participaciones. No obstante, estas comisiones suelen ser más bajas que los costes derivados de operar con oro físico. Es importante tener en cuenta que los ETFs de oro pueden presentar errores de seguimiento (tracking errors), lo que significa que podrías no beneficiarte completamente de las subidas del precio del oro.
ALMACENAMIENTO Y SEGURIDAD	Poseer oro físico implica asumir consideraciones adicionales sobre seguridad y almacenamiento para proteger la inversión.	No requieren gestión de almacenamiento ni medidas de seguridad, ya que no estás en posesión directa del oro.
LIQUIDEZ	Vender oro físico es, por lo general, relativamente sencillo, ya que siempre hay compradores. Sin embargo, no permite una venta instantánea, como ocurre con los ETFs.	Al igual que las acciones, los ETF de oro se pueden comprar y vender de forma rápida y sencilla durante el horario del mercado.
RENTABILIDAD	Su valor depende principalmente del precio spot actual del oro.	Su valor depende del precio de cotización del ETF, que a su vez sigue (aunque no siempre perfectamente) la evolución del precio del oro.

Resumen: Todo lo que necesitas saber sobre los mejores ETFs de oro

Los ETFs de oro ofrecen una forma cómoda y rentable de obtener exposición al oro sin necesidad de poseer el metal físico. Presentan múltiples ventajas, como la facilidad para operar en bolsa, la alta liquidez, la ausencia de costes logísticos o de almacenamiento, y la posibilidad de invertir cantidades fraccionadas. No obstante, también presentan inconvenientes: conllevan riesgo de contraparte, pueden tener errores de seguimiento, aplican comisiones de gestión y no ofrecen la seguridad física del oro tangible.

Para muchos inversores, las ventajas superan a los riesgos, convirtiendo a los ETFs de oro en una opción atractiva dentro de una estrategia de inversión diversificada. Sin embargo, ninguna inversión ofrece la misma seguridad, control y valor intrínseco que tener oro físico. Comprar lingotes o monedas de oro garantiza que tu patrimonio esté protegido y disponible cuando más lo necesites.

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